Reflexión: La intención y el éxito

No te puedes sentir algo que no eres, pero siempre puedes luchar por conseguirlo, el problema es que no quieres creer que eres capaz y por eso ni lo eres, ni luchas, ni lo sientes. No puedes pretender que los problemas se resuelvan sin intentar resolverlos, porque intentarlo no es probar dos, tres o mil veces algo; intentarlo es fallar hasta el acierto. Del mismo modo, conseguirlo no es acertar algo un número de veces; conseguirlo es acertar siempre. ¿Cómo pretendes conseguirlo si ni siquiera has probado a fallar?

Sentir no es creer algo. Puedes creer que eres capaz de hacer algo y luego fallar. Sentirlo es creerse capaz y conseguirlo, acertar siempre. No se puede sentir sin creer, pero no por creer llegarás a sentir algo.

No puedes conformarte con la vida, conformarse es dejarse pisar por las cotas más altas, alcanzarlas consiste en poder disfrutarlas. De momento sueña para poder creer que las disfrutas, al menos hasta el día que logres conseguirlo, sientas y puedas disfrutar de una verdadera vida.

Que no seas capaz de hacer algo significa que te has acomodado a no intentarlo o a abandonar antes de acertar o de conseguirlo. A todos nos cuesta el mismo trabajo intentar hacer cosas, la diferencia es que algunos lo intentaron, acertaron y lo consiguieron mucho antes de que tu abandonases. Cuando consigues algo es más fácil recorrer el mismo camino para volver a lograrlo.

Errar es más decisivo que acertar mil veces, de nada sirve esforzarse haciendo un dibujo si luego sin querer lo manchas, puedes fallar al intentarlo, pero no intentarlo es grave error.

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